Cherie Booth Blair
Nació en 1954 en el seno de una familia de clase obrera.
Cherie forma parte de la minoría católica de ascendencia irlandesa.
Al cumplir los dos años, su padre los abandonó para incursionar en el mundo de la farándula, lo que logró con relativo éxito. La esposa de Anthony Blair, primer ministro británico, confiesa que no le gusta hablar de este tema, sin embargo ha declarado que hace poco conoció a una media hermana que descubrió en Australia; parece ser que podría haber muchos otros hallazgos.
Cherie fue una estudiante destacada, logró sus diplomas a través de becas, para ingresar en la facultad de Derecho de la afamada London School of Economics donde se colocó como la primera de su clase en el examen de grado.
La profesión fue el primer punto que la unió a Blair ya que ambos se conocieron durante la preparación como "barristers" que es una de las dos opciones para ejercer la abogacía en Reino Unido, la otra es "solicitors", que son los primeros los que van a las cortes.
Tony Blair y Cherie, se volvieron militantes comprometidos del partido Laborista, los dos participaron en el movimiento cristiano socialista, los dos se lanzaron para puestos públicos y tomaron la bandera de los derechos humanos.
Algunos dicen que esta historia compartida fue la que los ha sostenido en su matrimonio desde 1980, pese a las profundas diferencias que también tienen.
En 1983 mientras que Tony ganaba un lugar por Sedgefiel en Dirham, Cherie perdió el mismo año al lanzarse por Thanet North en Kent.
Cherie no pertenecía a una clase alta. Tony Blair, por su parte ocupaba un puesto y a raíz de que ella perdió, decidieron que sólo Tony haría una carrera política.
Aunque son de religiones distintas, esto no ha sido motivo para separar al matrimonio Blair, el primer ministro británico es como un "criptocatólico" ya que la acompaña a misa y la entiende”, según declaraciones de Austen Ivereigh, un amigo sercano a Cherie.
Por el contrario afirma Ivereigh, la diferencia más marcada es que Blair es pragmático y ella una idealista. Lo cual resulta difícil si se trata de la esposa del primer ministro britático.
Mujer reconocida por crear polémica en sus opiniones, Cherie se ha expresado en diversas ocaciones en temas como la violencia intrafamiliar, el ejercicio del poder, el papel de la mujer en la jerarquía católica o la pena de muerte, entre otros.
En alguna ocasión tuvo que pedir disculpas públicas por haber dicho que en algunos casos entendía la posición de los palestinos suicidas.
El ejercer la palabra con tanta libertad posiciona a Cherie como una mujer que tiene posiciones claras y una opinión propia. Pese a ello, no todos opinan lo mismo, el periodista de The Observer, David Aaronovitch, afirma que Cherie es una persona insegura que se refugia en su religiosidad y que ha sido criticada por algunos negocios con un exconvicto, tener una "gurú de estilo de vida" o llevar a sus hijos a escuelas caras.
Esa libertad de expresión de Cherie la ha colocado en el blanco de las críticas, la integrante del partido Laborista, Ann Widecombe, se mostró sorprendida de que Cherie escribiera sobre temas políticos en The Tablet ya que "no ha entendido que el papel de la esposa del primer ministro es no intervenir en asuntos públicos".
Combinar sus actividades laborales y además ser esposa del primer ministro británico ha significado para Cherie un reto, pues no se puede olvidar que la esposa del primer ministro forma parte de un despacho de abogados Matrix que en sintonía con sus convicciones defienden, entre otras cosas, temas de derechos humanos.
Pese a ser una de las fundadoras de dicho despacho, no se ha librado de tener que enfrentar algunas batallas. Uno de sus socios, Rabinder Singh fue una de las personas que llamó a realizar una investigación al gobierno de Blair sobre el tema de las armas de destrucción en Irak.
“Sus temas son temas fuertes, controvertidos, pero firmes. Creo que si no fuera la esposa del primer ministro sería mucho más escuchada de lo que es y tendría un papel más relevante" sostiene su gran amigo Austen Ivereigh.
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