jueves, enero 27, 2011

Biografia y Vida de Pamela Suzette Grier


Pamela Suzette Grier
nace en 1949. Su debut en Beyond the Valley of the Dolls (1970) es discreto pero sirve para que Roger Corman, maestro de películas de serie B, se fije en ella y se la recomiende a Jack Hill para que la incluya en el film carcelario The Big Doll House. Pam participa en varios títulos de este género, muy de moda en los setenta, con mujeres ardientes en celdas y demás.

1973 es un año muy productivo para la joven actriz. Participa en tres films muy dispares: The Arena (con gladiadores y despampanantes esclavas luchando al más puro estilo Espartaco), Scream, Blacula, Scream! (una curiosa versión sobre el mito del vampiro) y Coffy, conocido film que la consagra como reina de la blaxploitation. Con el tiempo llegan otros éxitos de taquilla como Foxy Brown, Sheba, Baby, Friday Foster y Greased Lighting.

El prototipo de papel que Pam tiene en estos films es siempre muy parecido: chica dura y autosuficiente, una heroína de a pie. Con la entrada de los ochenta desaparece la blaxploitation, pero el trabajo de la actriz sigue viento en popa: Grier se adapta bien a los nuevos tiempos y trabaja en Distrito Apache, Stand Alone, The Vindicator y Por encima de la ley.

La segunda mitad de los ochenta y primera de los noventa son los años de menos productividad de la actriz. La vemos de nuevo en 2013: rescate en L.A. (1996) y Mars Attacks! (1996).

Pero el verdadero retorno de la reina de la blaxploitation es con el papel protagonista de Jackie Brown (1997), un film de Quentin Tarantino. Admirador del cine afroamericano de los setenta, Tarantino rinde un claro homenaje a este cine y, para ello, elige como protagonista a su máxima estrella: Pam Grier.

El éxito de Jackie Brown sirve para que la actriz vuelva a tener la agenda llena de proyectos: Holy Smoke (1999), Fortaleza infernal 2 (1999), Fantasmas de Marte (2001) y Pluto Nash (2002).

Vida de Sylvester Stalone

Nacido en Nueva York, Stallone fue al colegio en Filadelfia, donde empezó a interesarse por la interpretación. Pasó dos años en el American College of Switzerland en Ginebra. De vuelta en los Estados Unidos, se matriculó en arte dramático en la Universidad de Miami, donde también dio sus primeros pasos como guionista. En 1973 pasó por casi todos los castings de la ciudad, pero tuvo poco éxito.

Durante este período, Sylvester se volcó en la escritura de guiones.
Su primera oportunidad relevante se le presentó en 1974 cuando consiguió uno de los papeles principales en The Lords of Flatbush. Este film le supuso también su primer crédito como guionista; concretamente por los diálogos adicionales.

Con el dinero que ganó gracias a este trabajo, Stallone dejó Nueva York y se mudó a Hollywood. Ya instalado, comenzó de nuevo a llamar a todas las puertas de los estudios y de los representantes artísticos, consiguiendo algunos papeles de reparto en cine y televisión. Paralelamente, continuó con su trabajo como guionista.

El púgil Rocky Balboa cobró vida en un guión que Stallone escribió enteramente a mano. Varios productores le hicieron suculentas ofertas por el guión, a condición que el papel principal de la película fuera interpretado por un actor de renombre. Pero Stallone insistía en que debía ser él quien encarnara a Rocky. Sly se mantuvo firme y su perseverancia dio finalmente resultado: Rocky ganó el Oscar a la mejor película en 1976 y le valió el Oscar al mejor guión original.

Los créditos de Stallone como actor, guionista y director a la vez incluyen Rocky II y La cocina del infierno. Como actor y coguionista ha hecho F.I.S.T., Acorralado, Rambo II, Rhinestone y Rambo III. También ha coescrito, dirigido y producido La fiebre continúa y ha protagonizado Halcones de la noche, Evasión o victoria, Tango y Cash y Encerrado. Rocky V, protagonizada y escrita por Stallone y dirigida por Jon Avildsen, se estrenó en 1990.

A su vez, Stallone ha encabezado el reparto de Get Carter, Máximo riesgo, Demolition Man, El especialista, Asesinos, Pánico en el túnel y Driven, y ha interpretado el difícil y emotivo papel de Freddy Heflin en la producción Copland, trabajo que le valió el aplauso unánime del público y la crítica internacional.

A sus 59 años, el actor ha decidido desempolvar aquellos dos míticos papeles que le alzaron hasta lo más alto, los de Rocky y Rambo. Para ello, no ha dudado en volver a ponerse los calzones para rodar la sexta entrega del mítico boxeador, bautizada como Rocky Balboa (2007), en la que el viejo y acabado italiano se plantea el reto de volver a triunfar sobre el cuadrilátero. Para el 2008 nos sorprenderá con la cuarta parte del ex combatiente del Vietnam, cuyo título provisional es Rambo IV: En los ojos de la serpiente, y en la que tendrá que volver a la carga para liberar a su hija secuestrada.

Biografia de Johnny Depp

Aunque nació en Kentucky, Johnny Depp se crió en Florida. En un principio iba para músico: formó parte de varios grupos de rock, y uno de ellos, The Kids, tuvo bastante éxito. No se interesó por el cine hasta algo más tarde, cuando su esposa en aquel tiempo le presentó al actor Nicolas Cage. Fue él quien le animó a intentar ser actor.

Debutó en 1984 con Pesadilla en Elm Street, donde daba vida a una de las víctimas de Freddy (años después, siendo ya una estrella, hizo un cameo en otra entrega de la saga). A aquel primer film siguieron otros, entre ellos el oscarizado Platoon de Oliver Stone. Pero lo que realmente marcó su carrera y le convirtió en ídolo de adolescentes fue protagonizar durante cuatro temporadas la serie 21 Jump Street.

Johnny volvió al cine en 1990 con dos trabajos que despertaron la atención de la crítica: el de Cry-Baby y, sobre todo, el de Eduardo Manostijeras. Su entrañable papel en el film de Tim Burton lo situó entre los artistas más deseados de Hollywood. Depp volvió a colaborar con Burton en otras tres películas: Ed Wood, Sleepy Hollow y, más recientemente, Charlie y la fábrica de chocolate.

Tras el éxito de Eduardo Manostijeras, Johnny siguió sorprendiendo a crítica y público con su buen hacer en títulos como Benny & Joon, ¿A quién ama Gilbert Grape? o Dead Man. Incluso fue nombrado mejor actor de su generación por su actuación en Donnie Brasco, donde compartía protagonismo con Al Pacino.

Ya en la nueva década, Johnny Depp ha participado en proyectos como la comedia romántica Chocolat, coprotagonizada por Juliette Binoche; el film de aventuras Piratas del Caribe: La maldición de la Perla Negra, en el que comparte cartel con Orlando Bloom y Geoffrey Rush y por la que fue nominado al Oscar, así como en su secuela Piratas del Caribe: El Cofre del Hombre Muerto, ; El mexicano, la tercera parte de El mariachi de Robert Rodriguez, que interpreta junto a Antonio Banderas y Salma Hayek; y el thriller La ventana secreta.

Otros títulos de su filmografía son Don Juan DeMarco, Antes que anochezca, Vidas furtivas, La novena puerta, Miedo y asco en Las Vegas, Nick of Time, Blow, Desde el infierno...Además, Depp debutó como director en 1997 con The Brave, una película que coescribió junto a su hermano y también protagonizó. El film llegó a ser nominado a la Palma de Oro en Cannes.

Tras disfrutar de una gran éxito con sus Piratas del Caribe, ya encumbrado y reconocido como uno de los mejores intérpretes de las artes cinematográficas, Johnny se embarcó en un proyecto vertiginoso, la grabación de The Libertines. En la película, su personaje sufría una terrible enfermedad degenerativa fruto de su degenerada vida y promiscuidad sexual, y ofreció las imágenes más desagradables que hayamos visto del guapo Depp.

Johnny alternó este trabajo con las películas Descubriendo Nunca Jamás (2004) y Charlie y la Fábrica de Chocolate (2005), así como el doblaje del personaje principal de La novia cadáver, que estrenó a finales de ese mismo año. El 2006 fue el año de la secuela de Piratas del Caribe: El cofre del hombre muerto, y su éxito eclipsó todas las espectativas.

2007 fue un año especialmente difícil en la vida del actor, que tuvo que ingresar a su hija Lily-Rose, fruto de su unión con la cantante Vanessa Paradis, en un hospital londinense, aquejada de una extraña enfermedad. El rodaje del musical Sweeney Todd tuvo que ajustarse a las necesidades del actor, que pasó mucho tiempo junto a su familia en el centro hospitalario. Finalmente, Lily-Rose fue dada de alta,y Johnny pudo volver a volcarse en su trabajo.

Este año ha estrenado la última de las entregas de Piratas del Caribe, que llevaba por título En el fin del mundo, con gran acogida de público. Se espera que Sweeney Todd vea la luz a finales de este año en Estados Unidos, y además se rumorea que Johnny podría intervenir en las dos secuelas de la exitosa Sin City, de Frank Miller y Robert Rodríguez, ya en el 2008.

domingo, enero 02, 2011

Biografia de Franco Donatoni

(Verona, 1927) Compositor italiano. Fue alumno de I. Pizzetti. Ha escrito abundante música, sobre todo para gran orquesta, y ha evolucionado del neoclasicismo al dodecafonismo. Entre sus creaciones cabe citar Antecedente X (1980), Il sigaro di Armando (1982), In Oltre (1988) y Settembre Musica (1990). En 1985 se le concedió el título de Commandeur dans l'Ordre des Arts et des Lettres. En 1992 se organizaron una serie de conciertos en su honor en el marco de Milano Musica.

Biografia de Salvador Dalí

(Figueres, Gerona, 1904 - Púbol, 1989) Pintor español. Salvador Dalí nació en una madrugada de la primavera de 1904 en el seno de una familia burguesa, hijo de un notario bienpensante y de una sensible dama aficionada a los pájaros. Más tarde escribiría: "A los tres años quería ser cocinero. A los cinco quería ser Napoleón. Mi ambición no ha hecho más que crecer y ahora es la de llegar a ser Salvador Dalí y nada más. Por otra parte, esto es muy difícil, ya que, a medida que me acerco a Salvador Dalí, él se aleja de mí".

Puesto que la persecución sería incesante y el objetivo no habría de alcanzarse nunca y, dado que en ningún recodo de su biografía estaba previsto que hallara el equilibrio y la paz, decidió ser excesivo en todo, intrepretar numerosos personajes y sublimar su angustia en una pluralidad de delirios humorísticos y sórdidos. Se definió a sí mismo como "perverso polimorfo, rezagado y anarquizante", "blando, débil y repulsivo", aunque para conquistar esta laboriosa imagen publicitaria antes hubo de salvar algunas pruebas iniciáticas, y si el juego favorito de su primera infancia era vestir el traje de rey, ya hacia sus diez años, cuando se pinta como El niño enfermo, explora las ventajas de aparentar una constitución frágil y nerviosa.

Su precocidad es sorprendente: a los doce años descubre el estilo de los impresionistas franceses y se hace impresionista, a los catorce ya ha trabado conocimiento con el arte de Picasso y se ha hecho cubista y a los quince se ha convertido en editor de la revista Studium, donde dibuja brillantes pastiches para la sección titulada "Los grandes maestros de la Pintura".

En 1919 abandona su Cataluña natal y se traslada a Madrid, ingresa en la Academia de Bellas Artes y se hace amigo del gran poeta granadino Federico García Lorca y del futuro cineasta surrealista Luis Buñuel, de quien sin embargo se distanciará irreversiblemente en 1930. En la capital adopta un extraordinario atuendo: lleva los cabellos largos, una corbata desproporcionadamente grande y una capa que arrastra hasta los pies. A veces luce una camisa azul cielo, adornada con gemelos de zafiro, se sujeta el pelo con una redecilla y lo lustra con barniz para óleo. Es difícil que su presencia pase desapercibida.

En los revueltos y conflictivos meses de 1923 sufre un desafortunado contratiempo. En la Academia de Bellas Artes a la que está adscrito se producen manifestaciones en contra de un profesor, y antes de que dé comienzo el discurso oficial y se desate la violenta polémica, Salvador abandona la sala. Las autoridades creen que con este gesto ha sido él quien ha dado la señal de ataque y rebelión y deciden expulsarlo durante un año. Después, de nuevo en Figueras, los guardias vienen a detenerlo y pasa una temporada en la cárcel.

A la salida de prisión recibirá dos alegrías. La primera, una prensa para grabado que su padre le regala, y la segunda, la visita de su excelente compañero de la Residencia de Estudiantes de Madrid Federico García Lorca, quien, en las calurosas noches del verano de Cadaqués, lee a toda la familia Dalí sus versos y dramas recién compuestos. Es allí, junto al Mediterráneo, donde García Lorca redacta la célebre "Oda a Salvador Dalí", publicada unos años después, en 1929, en la Revista de Occidente. Pronto será también Luis Buñuel quien llegue a Cadaqués para trabajar con su amigo Salvador en un guión cinematográfico absolutamente atípico y del que surgirá una película tan extraña como es El perro andaluz.

En 1927 Dalí viaja por primera vez a París, pero es al año siguiente cuando se instala en la capital francesa y se une al grupo surrealista que lidera el poeta André Breton. Este último terminará expulsándolo del movimiento algunos años después, en una memorable sesión de enjuiciamiento a la que Dalí compareció cubierto con una manta y con un termómetro en la boca, aparentando ficticiamente estar aquejado de fiebre y convirtiendo así el opresivo juicio en una ridícula farsa.

La triple acusación a la que tuvo entonces que enfrentarse Dalí fue: coquetear con los fascismos, hacer gala de un catolicismo delirante y sentir una pasión desmedida e irrefrenable por el dinero. A esto precisamente alude el célebre apodo anagramático con que fue motejado por Breton, Avida dolars, acusación que lejos de desagradar al pintor le proporcionaba un secreto e irónico placer. De hecho, después de conocer a la que sería su musa y compañera durante toda su vida, Gala, entonces todavía esposa de otro surrealista, el poeta Paul Eluard, Dalí declaró románticamente: "Amo a Gala más que a mi madre, más que a mi padre, más que a Picasso y más, incluso, que al dinero."

Salvador se enamoró de Gala en el verano de 1929 y con ella gozó por primera vez de las mieles del erotismo. Es la época en que pinta Adecuación del deseo, Placeres iluminados y El gran masturbador, pintura esta última que fue atacada y desgarrada por el fanático grupo puritano los Camelots du Roy. Mientras tiene lugar una exposición de sus obras en la Galería Goemans de París, la joven y apasionada pareja se refugia y aísla en la Costa Azul, pasando los días y las noches encerrados en una pequeña habitación de un hotel con los postigos cerrados.

Enterado el padre de Salvador de la vida disoluta de su hijo por un artículo de Eugenio d'Ors aparecido en La Gaceta Literaria, rompe relaciones con su vástago; pero ello no debió afectarlo demasiado, o quizás sí, puesto que es en esa época en que el artista realiza lo mejor de su obra, como el célebre cuadro Persistencia de la memoria (1931), donde blandos relojes cuelgan de la rama de un árbol, del borde de un pedestal y sobre una misteriosa forma tendida en la vasta extensión de la playa.

En 1934 viaja con su ya inseparable Gala a Estados Unidos, donde desembarca y se presenta ante los periodistas con un enorme pan cocido por el cocinero del trasatlántico que les ha transportado. En sus erráticas manifestaciones no duda en asociar el mito hitleriano con el teléfono y a Lenin con el béisbol. Son todas bromas absurdas que tratan de quitar hierro a una situación política amenazante. Dos años después se desata la atroz guerra civil en España y una de las primeras muestras de la probidad de los militares insurrectos es el infame asesinato de su amigo Federico García Lorca, crimen que conmocionó a la opinión pública internacional. Dalí escribió: "Lorca tenía personalidad para dar y vender, la suficiente para ser fusilado, antes que cualquier otro, por cualquier español."

En 1938 conoce por fin, gracias al escritor vienés Stefan Zweig, a Sigmund Freud, quien había sido el gran inspirador de la estética surrealista, de la que Dalí no se siente marginado pese a las bravatas de Breton, sino que por el contrario se considera el único y más genuino exponente. El padre del psiconálisis había dado pábulo a la nueva indagación del inconsciente con su libro La interpretación de los sueños (1900), pero nunca se había tomado demasiado en serio a sus jóvenes admiradores de París.

No obstante, el 20 de julio de 1938, tras el encuentro, Freud anotó en su diario: "Hasta entonces me sentía tentado de considerar a los surrealistas, que aparentemente me han elegido como santo patrón, como locos integrales (digamos al 95%, como el alcohol puro). Aquel joven español, con sus espléndidos ojos de fanático e innegable dominio técnico, me movió a reconsiderar mi opinión". Por su parte, el artista realizó asombrosos y alucinantes retratos del "santo patrón" de los surrealistas.

Instalado otra vez en Nueva York en 1939, Dalí acepta un encargo para decorar unos escaparates comerciales. El tema que elige es el del Día y la Noche, el primero evocado por un maniquí que se mete en una bañera peluda y la segunda, por medio de brasas y paños negros extendidos, pero la dirección modifica el decorado sin consultar al autor. Dalí, iracundo, vuelca la bañera de astracán llena de agua y la lanza contra los cristales del escaparate produciendo un gran estrépito y un notable destrozo.

Pese a que la opinión pública norteamericana le aplaude el vigor con que ha sabido defender la propiedad intelectual, es juzgado por los tribunales y condenado a pagar los desperfectos. Tampoco consigue concluir su siguiente proyecto para decorar un pabellón de la Feria Internacional de Nueva York, el cual debía llevar el significativo título de Sueño de Venus.

A España regresó en 1948, fijando su residencia de nuevo en Port-Lligat y hallando en el régimen del general Franco toda suerte de facilidades. El gobierno incluso declaró aquel rincón catalán que tanto fascinaba al pintor "Paraje pintoresco de interés nacional". Para muchos historiadores del arte lo mejor de su obra ya había sido realizado y, sin embargo, aún le quedaban cuarenta años de caprichosa producción y de irreductible endiosamiento y exhibicionismo, con apariciones públicas del estilo de la que protagonizó en diciembre de 1955, cuando se personó en la Universidad de la Sorbona de París para dar una conferencia en un Rolls Royce repleto de coliflores. En vida del artista incluso se fundó un Museo Dalí en Figueras; ese escenográfico, abigarrado y extraño monumento a su proverbial egolatría es uno de los museos más visitados de España.

Durante los años setenta, Dalí, que había declarado que la pintura era "una fotografía hecha a mano", fue el avalador del estilo hiperrealista internacional que, saliendo de su paleta, no resultó menos inquietante que su prolija indagación anterior sobre el ilimitado y equívoco universo onírico. Pero quien más y quien menos recuerda mejor que sus cuadros su repulsivo bigote engominado, y no falta quien afirme haberlo visto en el Liceo, el lujoso teatro de la ópera de Barcelona, elegantemente ataviado con frac y luciendo en el bolsillo de la pechera, a guisa de vistoso pañuelo, una fláccida tortilla a la francesa.

En su testamento, el controvertido artista legaba gran parte de su patrimonio al Estado español, provocando de ese modo, incluso después de su muerte, acaecida en 1989, tras una larga agonía, nuevas y enconadas polémicas. El novelista Italo Calvino escribió que "nada es más falsificable que el inconsciente"; acaso esta verdad paradójica y antifreudiana sea la gran lección del creador del método paranoico-crítico, de ese maestro del histrionismo y la propaganda, de ese pintor desaforado y perfeccionista, de ese eximio prestidigitador y extravagante ciudadano que fue Salvador Dalí. El chiflado prolífico del Ampurdán, la llanura catalana barrida por el vertiginoso viento del norte que recoge las suaves olas del mar Mediterráneo en una costa tortuosa y arriscada, descubrió el arte de la mixtificación y el simulacro, de la mentira, el disimulo y el disfraz antes incluso de aprender a manejar su lápiz con la exactitud disparatada y estéril de los sueños.

Su longeva existencia, tercamente consagrada a torturar la materia y los lienzos con los frutos más perversos de su feraz imaginación, se mantuvo igualmente fiel a un paisaje deslumbrante de su infancia: Port-Lligat, una bahía abrazada de rocas donde el espíritu se remansa, ora para elevarse hacia los misterios más sublimes, ora para corromperse como las aguas quietas. Místico y narciso, Salvador Dalí, quizás uno de los mayores pintores del siglo XX, convirtió la irresponsabilidad provocativa no en una ética, pero sí en una estética, una lúgubre estética donde lo bello ya no se concibe sin que contenga el inquietante fulgor de lo siniestro. Dalí exhibió de forma provocativa todas las circunstancias íntimas de su vida y su pensamiento.

Biografia de Felix Dahn

Historiador, jurista y poeta alemán. Sus padres eran actores dramáticos. Estudió en las Universidades de Munich y Berlín, y en esta última ciudad perteneció al cenáculo del "Tunnel über der Spree". En 1862 es nombrado profesor libre de Historia del Derecho alemán en la Universidad de Munich y en 1863 pasó a enseñar en la de Wurzburgo, continuando más tarde en las de Königsberg y Breslau. Consiguió también el nombramiento "honoris causa" en Filosofía y Medicina.

Es singularmente célebre por sus novelas históricas y narraciones, en las que ensalza a los jóvenes pueblos germánicos que, franqueado el "limes" romano, se extendieron por Europa y dieron lugar a nuevos países y reinos. La novela Una lucha por Roma es su mejor obra y ha gozado de mucha popularidad, aun cuando resulte un típico ejemplo de las "novelas de profesor", en las que la narración y la documentación histórica alternan entre sí, sin llegar a una verdadera fusión artística.

Felix Dahn compuso también baladas, textos líricos, dramas, novelas y ensayos críticos que nada ofrecen de característico. En colaboración con su esposa Thérèse, publicó Walhall, obra de divulgación acerca de la mitología y las sagas germánicas.