Carlo Azeglio Ciampi
Carlo Azeglio Ciampi nació en Livorno el 9 de diciembre de 1920. Cursó estudios en Pisa en la Escuela Normal Superior, por la que se diplomó en 1941. En la Universidad de la misma entidad obtuvo una doble licenciatura en Derecho y Letras en el año de 1946.
Durante la Segunda Guerra Mundial sirvió en el Ejército italiano y tras la caída de Mussolini en 1943 estuvo con los partisanos antinazis. En 1945 militó en el Partido de Acción de Ferruccio Parri, pero pronto se desvinculó de cualquier organización política. En 1946 entró a trabajar por la vía de oposiciones en el Banco de Italia.
Dentro de esta institución se desempeñó como técnico en el Departamento de Investigación Económica (1960-1970), Jefe del departamento (1970-1973), Secretario General del Banco (1973-1976), Vicedirector General (1976-1978), Director General (1978-1979) y, finalmente, Gobernador (1979-1993).
En este cargo puso en marcha importantes reformas que beneficiaron a la entidad como la liberalización monetaria y bancaria o la entrada de la Lira en el Sistema Monetario Europeo. Esta completa modernización le situó como uno de los candidatos con más aptitudes al Ministerio de Economía.
Considerado un economista de formación humanista, Ciampi salvaguardó la independencia del banco del Estado y se labró una imagen de austeridad y apego al trabajo. Como titular representó a Italia en las juntas de gobernadores de diversas instituciones financieras internacionales.
El 26 de abril de 1993, el presidente de la República Oscar Luigi Scalfaro designó a Ciampi como primer jefe de Gobierno técnico, esto es, no adscrito a ninguna formación política, aunque algunos líderes políticos insistieron en sus simpatías democristianas.
El 29 de abril formó un gabinete, el número 51 desde la proclamación de la República en 1946, con miembros de la Democracia Cristiana (DC), el Partido Socialista (PSI), los excomunistas del Partido Democrático de la Izquierda (PDS) y los Verdes.
Ciampi suplió las bajas con figuras independientes, configurando así el gobierno más apolítico desde el final de la guerra. De hecho, sería el último en que estuvieron presentes la DC y el PSI antes de su desintegración como partidos.
Su gestión pudo mantenerse al margen de turbulencias políticas de toda índole, como la ofensiva judicial contra los políticos acusados de corrupción, atentados terroristas de oscura autoría (sin duda, con propósitos desestabilizadores), e incluso una confusa trama golpista de oficiales del Ejército, desarticulada en octubre de 1993.
Hostigado en el Parlamento por la Liga Norte (LN) de Umberto Bossi y la Refundación Comunista (RC) de Sergio Gavarini, y sin el beneplácito del PDS, Ciampi gozó del margen de maniobra que le confería su única responsabilidad ante el presidente.
Concluido con éxito su cometido, el 13 de enero de 1994 presentó la dimisión y tres días después Scalfaro disolvió el Parlamento y convocó a elecciones, que habrían de certificar el final del período de transición de la I a la II Repúblicas.
El 11 de mayo Ciampi fue sucedido en el Gobierno por el vencedor en los comicios, el magnate de la comunicación y recién estrenado político, Silvio Berlusconi.
El 18 de mayo 1996, Ciampi entró como independiente en el gobierno presidido por Romano Prodi y formado por El Olivo, la coalición de centro-izquierda que auspiciaba el PDS, al frente del superministerio de Tesoro y Presupuesto.
La rigurosa labor de Ciampi permitió a Italia cumplir con los requisitos de convergencia para acceder a la moneda única europea, logro que parecía casi imposible dos años atrás, en especial el déficit público, rebajado a menos del 3% del PIB, y la deuda pública, que se dio por válida por su evolución positiva según la interpretación flexible de los cumplimientos que finalmente se adoptó.
La otra condición imprescindible, la vuelta de la lira al mecanismo de cambios del Sistema Monetario Europeo, del que se había retirado en 1992, tuvo lugar el 25 de noviembre de 1996.
La trayectoria y el perfil de Ciampi suscitaban un amplio consenso, tal que su nominación al puesto de Presidente de la República por los partidos del Gobierno constituyó una rara ocasión para la confluencia con las principales fuerzas de la oposición.
El 13 de mayo de 1999 Ciampi fue investido por un colegio electoral de legisladores con 707 votos sobre 990. El Polo de la Libertad de Berlusconi votó con el bloque gubernamental, haciéndolo en contra o en blanco la LN, la RC y 180 representantes de diversos partidos que desacataron la disciplina parlamentaria. La inauguración de Ciampi, inicialmente prevista para el 28 de mayo, se adelantó al día 18 por la renuncia adelantada de Scalfaro.
Ciampi ha sido miembro de las juntas directivas del Consejo Nacional de Investigación italiano y del Instituto Adriano Olivetti para el Estudio de la Gestión de la Economía y Hacienda, así como miembro honorífico de la Sociedad de Economistas. Desde 1993 es gobernador honorario del Banco de Italia y en 1996 fue nombrado presidente de la Universidad Internacional de Venecia.
Además de la Cruz Militar obtenida durante la guerra, está en posesión de la Legión de Honor francesa y del Gran Cordón de la Orden del Sol Naciente de Japón. Es también caballero de las grandes cruces de las órdenes del mérito de las repúblicas italiana y alemana.
El 13 de mayo de 1999 fue nombrado Presidente de la República Italiana por el Parlamento. El 5 de mayo de 2005 recibió el Premio Carlomagno en la ciudad de Aquisgrán. La École Normale Supérieure de París lo nombró doctor honoris causa el 15 de junio del mismo año.
Durante su mandato, Ciampi mantuvo mediante viajes al exterior de Italia las buenas relaciones con distintos países del globo, mientras que en el frente interno se transformaba en un punto de referencia tanto para líderes opositores como para líderes gubernamentales.
Al finalizar su mandato en mayo de 2006, Ciampi renunció a una eventual reelección por 7 años más aduciendo su avanzada edad (86 años)optando por la senaduría vitalicia dispuesta para los ex presidentes.
Dejó el cargo el 15 de mayo del 2006, siendo sucedido por Giorgio Napolitano.
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