Gerardo Espinoza

Dinámica, entrega, gran recuperación y buen manejo de la pelota, cualidades que todo futbolista desearía tener, pero que no es fácil contar con ellas. Pero este no es el caso de Gerardo Espinoza, pues precisamente él es de los pocos jugadores que tienen en sus piernas estos elementos que les permiten hacer del balompié un arte.

Este joven futbolista surgido de las fuerzas básicas de los Zorros del Atlas empezó a dar muestra de su calidad cuando debutó con los Rojinegros el 11 de septiembre de 1999 en un parido ante Celaya correspondiente al torneo Invierno 99. Durante su estancia en Atlas, se convirtió en pieza fundamental en la zona del medio campo.

Para 2004 Gerardo Espinoza es comprado por comprado por Dorados de Culiacán, equipo con el que militó a partir del torneo Apertura 2004.

Desde luego, la calidad de este mediocampista le permitieron formar parte de la selección mexicana sub-23 que disputó en febrero de 2004 el torneo preolímpico de la CONCACAF y en el cual se consiguió el pase a los Juegos Olímpicos de Atenas a celebrarse ese mismo año.